Porque queremos cuidar tu salud en las distintas etapas de la vida, es importante realizar exámenes preventivos con una frecuencia, a lo menos anual.
La finalidad de los exámenes preventivos es detectar señales de enfermedades en pacientes que no han sido diagnosticados y en aquellos con factores de riesgo conocidos de presentar alguna enfermedad.
Lo anterior significa que, los exámenes preventivos permiten hacer diagnósticos oportunos e indicar tratamientos efectivos.
Los resultados de estos exámenes pueden indicar la aparición de trastornos metabólicos, hormonales, e incluso deficiencias nutricionales, lo que permite acceder a un tratamiento que evite que avancen o se reviertan.
Además, permiten detectar células cancerígenas o que presenten anomalías sospechosas en etapas iniciales. En el caso del cáncer, la detección temprana es un factor fundamental que permite un mejor pronóstico.
A continuación, se indican cuáles son los exámenes preventivos más frecuentes, qué problemas o patologías permiten identificar, a partir de qué edad deberías realizártelos y cuáles son exclusivos para hombres o para mujeres.
Sexo/Edad | Problema o patología | Examen |
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15 años y más | Control Diabetes Mellitus | Perfil bioquímico modificado* |
15 años y más | Anemia | Hemograma* |
15 años y más | Hipertiroidismo/Hipotiroidismo | Hormonas tiroídeas* |
15 años y más | Trastornos del matabolismo, hepático y renal | Perfil bioquímico modificado* |
Mujeres entre 25-64 años | Cáncer Cervicouterino | Papanicolau (PAP) |
40 años y más | Dislipidemia | Perfil lipídico* |
Mujeres mayores de 40 | Cáncer de mama | Mamografía |
Hombres mayores de 40 | Cáncer de próstata | Antígeno prostático* |
*Exámenes sin indicación de ayuno. Puedes hacértelos en cualquier momento del día. Perfil lipídico (con excepción de triglicéridos).