Cáncer de vejiga

El síntoma más frecuente es la presencia de sangre en la orina (hematuria macroscópica). En algunos casos, las personas con cáncer de vejiga también pueden experimentar síntomas como dolor al orinar, aumento de la frecuencia para orinar o incontinencia urinaria, signo que se suele confundir con una cistitis.

El proceso para diagnosticar cáncer de vejiga en un paciente que tiene orina con sangre consiste en realizar un escáner o tomografía axial computarizada (TAC) y una cistoscopia. Este último es un examen con el cual se revisa la vejiga usando una sonda de endoscopia.

Existen diferentes alternativas de tratamientos para este tipo de cáncer, como la cirugía inmunoterapia y quimioterapia, dependiendo si el cáncer de vejiga es superficial o profundo.

• Tratamiento del cáncer vesical superficial: Se realiza con cirugía endoscópica, conocida como resección transuretral de la vejiga. Esta cirugía es tanto diagnóstica como terapéutica en algunos casos. En pacientes con enfermedad superficial de alto grado o con recurrencias frecuentes, se recomienda sumar tratamientos complementarios intravesicales mediante el uso de inmunoterapia con vacuna de BCG o quimioterapia intravesical ambulatoria.
• Cistectomía Radical: En casos en que el tumor profundo invade la pared muscular o en los cánceres superficiales de alto riesgo que no responden a tratamientos complementarios, habitualmente se recomienda realizar esta cirugía mayor que requiere la extracción de la vejiga, próstata y ganglios linfáticos pelvianos en el caso del hombre. En el caso de las mujeres, se requiere extraer la vejiga, trompas de Falopio, ovarios, cuello del útero y los ganglios linfáticos pelvianos.

Durante esta cirugía, una vez que se extrae la vejiga y el cirujano debe crear una derivación urinaria. Existen 3 tipos de derivación urinaria que son las más reconocidas internacionalmente: conducto ileal, Indiana Pouch y Neovejiga.

La Neovejiga es una bolsa creada para contener la orina, usando un segmento de aproximadamente 70 cm de intestino delgado que se aísla considerando la reconstitución del segmento intestinal donante.

Con el segmento aislado se construye una esfera donde se conectan los uréteres. Adicionalmente, la esfera se conecta a la uretra y el paciente logra expulsar la orina por la vía habitual al tensionar los músculos abdominales y relajar ciertos músculos de la pelvis.

La Neovejiga es lo más cercano a una vejiga “normal”, pero se debe considerar que esta cirugía puede provocar incontinencia, evidenciando el paciente escapes de orina, durante el día y noche. Además, existe una posibilidad de hipercontinencia, impidiendo que se vacíe adecuadamente la Neovejiga, requiriendo el paciente cateterismo o autovaciamiento.

Dependiendo de la etapa en que sea detectado el cáncer de vejiga, será el porcentaje y tiempo de sobrevida que tenga el paciente, por eso es necesario consultar a un médico ante la aparición de sangre en la orina.

• Etapa I entre 75-90% a 5 años.
• Etapa II baja a 50% a 5 años.
• Etapa III tiene sobrevida de 20% a 5 años.
• Etapa IV (metastásica) menos de 5% a 5 años.