Consejos para padres de niños y niñas con TEA

Si tu niño/a tiene TEA, debe recibir apoyo profesional de manera temprana para poder tratar los comportamientos que influyen en su vida diaria.

Existen distintos profesionales con experiencia en TEA que pueden tratarlos, entre ellos se encuentran:

• Psicólogos infantiles: Realizan la detección precoz y la intervención temprana en niños con TEA, así como el acompañamiento y la atención tanto de los/as niños/as como de sus familias. Las intervenciones incluyen estimulación cognitiva, manejo y control de emociones, resolución de conflictos, trabajo en habilidades de conducta y realización de talleres.

• Fonoaudiólogos: Contribuyen a mejorar la comunicación verbal y no verbal en niños/as con TEA y son un gran aporte en pacientes con deficiencia o falta de lenguaje. Trabajan en sistemas de comunicación alternativos o aumentativos, comprensión de intenciones mediante expresiones faciales y tonos de voz, enseñanza del contexto y qué palabras usar, etc.

• Trabajadores sociales: Ayudan a reducir la desigualdad social y facilitar la integración social de niños/as con TEA. Además asisten a las familias de los/as niños/as para lograr su bienestar, impartiendo información sobre recursos y ayudas existentes.

• Terapeutas ocupacionales: Dan apoyo a los/as niños/as con TEA en el desempeño de trabajos acordes a su edad, para que puedan ser autónomos y se integren socialmente.

En casa, como padre puedes dar aporte al tratamiento teniendo en cuenta una serie de pautas de estimulación:

• Delimitar espacios por rutinas: Como el orden y la estructura son importantes para niños/as con autismo, puedes establecer espacios para cada rutina e ir agregando actividades a medida que las rutinas se estabilizan.

• Dar oportunidades de comunicación: Para fomentar la interacción puedes idear y llevar a cabo situaciones dentro de las rutinas diarias, donde sea necesario que tu niño/a te pida ayuda.

• Informar el objetivo de las tareas: Para motivarlo/a a realizar las actividades es esencial contarle el propósito por el cual tiene hacerlas. 

• Crear un lugar de calma: Debes elegir un espacio de la casa en el que pueda ir a relajarse cuando lo desee, si lo/a acompañas es importante que mantengas la calma.

• Practicar un lenguaje conciso: Utiliza frases cortas que transmitan el mensaje puntual, responde más lentamente y no repitas el mensaje una y otra vez. Es fundamental respetar sus tiempos de habla.

• Poner límites: Si bien poner límites es difícil, a largo plazo influye positivamente en su desarrollo emocional. El hecho de que tenga autismo no debe ser motivo de falta de reglas, aunque sí es importante comunicarlas de forma comprensible.

• Dar el ejemplo en las acciones: Como adultos es importante enseñarles cosas que de rutinas pasen a ser hábitos en el futuro. Para eso es necesario ser perseverantes, serenos, amables y cariñosos con ellos o ellas.

Fuera del hogar, tu niño o niña debe encontrar espacios que sean agradables y saludables, evitando los ruidos y movimientos.

Los pacientes con TEA suelen ser sensibles al ruido, los sonidos fuertes de otros niños o adultos pueden ser molestos y generarles estrés.

Por eso se deben evitar lugares con demasiado movimiento y ruido, como estadios deportivos, centros comerciales grandes o parques con aglomeraciones.

Si lo/a llevas a una plaza o parque con juegos, es la oportunidad para relacionarse y comunicarse con otros niños.

Para contribuir al desarrollo del lenguaje y entrenar su habilidad social, motívalo/a a jugar y a conversar cuando se sienta seguro/a y confiado/a, sin presionar demasiado.

Si deseas mejorar la educación de tu hijo/a con TEA, recurre a profesionales en educación que trabajan con niños/as con el trastorno, estos pueden ser:

• Terapeutas ocupacionales: Realizan planes individualizados, desarrollando contenidos y formas de impartirlos. Además se adaptan a las necesidades de cada niño/a, llevan a cabo registros de evolución e informes de evaluación, y trabajan en estrecha colaboración con las familias.

• Psicologos y psiquiatras infantiles: Se dedican a la realidad sociocultural del  niño/a para mejorarla y ayudar a su autonomía en caso de dificultad social.

• Fonoaudiologos: Desarrollan estrategias fonoaudiologicas para prevenir o mejorar situaciones de exclusión social a traves de los trastornos del lenguaje.

Existen determinados deportes que tu niño/a puede realizar, los cuales son recomendados para pacientes con TEA. Algunos de ellos son:

• Futbol: Con este deporte grupal, aprenden a fortalecer actividades de desarrollo motor, junto con mantener apoyo social y habilidade comunicativas.

• Natación: Con este deporte, desarrolla la habilidad motora, interviene en equipos y competencias, participa en juegos y en grupos sin necesidad exclusiva de hablar con otros.

• Ciclismo: Una vez que aprenden a andar en bicicleta, los/as niños/as con autismo suelen disfrutar de esta actividad al aire libre.

• Artes marciales: Las artes marciales son ideales para desarrollar acciones predictibles y aprender reglas en el reto. Además fomentan la interacción y el contacto físico con otras personas, pueden servir para mejorar habilidades físicas como el equilibrio y la fuerza, y mejorar aspectos psicológicos como el autoestima y la disciplina.